EL PUENTE
Tenían prisa; mucha prisa. No en vano había un puente a la vista. Votaban precipitadamente pulsando el botón y corriendo como ratas que abandonan el lugar ante el presagio de algún acontecimiento. Acababan de dar un paso en la reforma de las pensiones, una reforma que afectará a varios millones de españoles. Pulsaron el botón y no tuvieron la decencia de esperar al resultado de la votación; mucho menos a que se levantara la sesión. Tenían prisa para apurar al máximo el puente.
Sinceramente, no me preocupa que los diputados salieran corriendo del Congreso el otro día. Lo verdaderamente preocupante es que hayan vuelto al hemiciclo a seguir haciendo de las suyas. El espectáculo de ver a nuestros diputados a la carrera ha quedado servido, por lamentable que parezca.
Luis Enrique Veiga Rodríguez
Publicado en : XORNAL21
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